Sabemos que todo cambio que se produzca en la rutina de los niños debe ser anticipado mediante procesos para que lo visualicen y no les pille de sorpresa, por ejemplo, enseñándoles  fotos del sito a donde viajemos, fotos de lugares que vayamos a visitar…para aportarles con ello una mayor seguridad. Esto todavía es más aconsejable en niños con déficit en su desarrollo.

El verano de 2020 las vacaciones con estos niños, quizás se nos complican un poquito más.  Sus comportamientos, tienden a generar mayor inseguridad incluso en sus propios padres, puesto que es complicado hacerles entender la utilidad del uso de la mascarilla, la importancia de lavarse constantemente las manos, la importancia de no tocar todo por donde vamos…

Entonces, ¿qué podemos hacer para poder disfrutar el verano con ellos? 

El lugar y el alojamiento

Tenemos varias opciones para salir en familia de manera más segura, como pueden ser:
•    Casas de alquiler vacacional, ya que en ellas podemos controlar todo lo que el niño toca, pues no hay espacios compartidos con otras personas. 
•    Camping, caravanas, aunque dependiendo del tipo de trastorno que padezca el menor, pueden ser menos aconsejables.
•    Es aconsejable que en el lugar donde hagamos el alquiler, ya sea piso, o camping, o caravana, solicitar que nos envíen fotos del mismo para poder mostrárselas al niño y recopilar fotos del lugar donde se encuentra. 

Visitar los alrededores ¿Pero si salgo a visitar algún lugar, como lo hago?

Es fundamental hablar a los niños y explicarles todo con mensajes claros, directos y adaptados a la edad evolutiva, dejando claras las normas actuales basadas en nuestra nueva normalidad sin asustarles: 
-    Cumplir distancia de seguridad con los demás.
-    No tocar nada y salir protegidos.

Motivarles para cumplir las normas

Todo esto se lo podemos explicar a los niños como un juego, y seguirlo en cada salida, por ejemplo: quien se salte la norma de distanciamiento social, da 10 saltos, quien toque menos cosas,  gana un helado. O juegos con tarjetas de colores para avisar de los comportamientos no adecuados: amarilla, roja, verde si lo hacemos bien…

Creatividad para que podamos “manejar” las situaciones que puedan ser complicadas, y recordemos que son niños, y como todos, pueden olvidar las normas, por esto es importante tener paciencia.
Disfrutad al máximo de los niños, y del verano.

Ana Ortega Rico. Psicóloga Colegiada nº 34172. 
Especialista en Atención Temprana. Psicomotricista. 
Asociación Cuenta Conmigo Ayuda a padres y niños.
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